Un nuevo estudio demuestra lo que muchos conductores de coches eléctricos sospechan: de una marca a otra, la satisfacción del cliente no tiene nada que ver. Si en general las puntuaciones son buenas para Tesla, Porsche o BMW, son realmente catastróficas para las marcas del grupo Stellantis.
Dar el salto a un coche eléctrico puede dar como resultado una experiencia más o menos buena. A pesar de que las estadísticas indican que la mayor parte de los clientes nunca regresarán a un coche con motor de combustión, la experiencia varía de forma sustancial de una marca a otra.
Así lo indica un estudio realizado por la consultora alemana USCALE, que ha entrevistado a miles de propietarios de coches eléctricos para medir el grado de satisfacción con su elección.
De los 4.966 clientes encuestados entre mayo a julio de 2024, el 24% afirmó que podría recomendar la marca de su coche eléctrico a un amigo o familiar. Esta proporción se eleva al 71% entre los clientes de Tesla, de los cuales sólo el 5% no aconseja la compra de un vehículo del fabricante americano.
Podemos imaginar que Tesla es una marca bastante comunitaria cuyos clientes quizás acepten más fácilmente los defectos de sus productos, pero este resultado confirma, sin embargo, una observación compartida por casi todos los conductores de coches eléctricos: Tesla es el único fabricante de coches eléctricos que ofrece una auténtica experiencia llave en mano, sin barreras de entrada y sin complicaciones, tanto por la venta online, como gracias a su red de Supercargadores donde los usuarios solamente tienen que enchufar el coche y listo.
Entre los que no recomiendan la marca, destacan aspectos negativos como la baja calidad general de fabricación, que es el punto más criticado por sus propietarios.
Porsche ocupa el segundo lugar en el ranking, con un 64% de «promotores» y sólo un 5% de detractores. Una vez más, imaginamos que los clientes de un fabricante de este tipo no serán especialmente críticos con su compra, a pesar de que en este caso hay alguna parte a destacar.
Y es que el Taycan ha sido el primer coche eléctrico de la marca alemana, y también el primer Porsche para buena parte de sus clientes. Por lo tanto, unos clientes que no son fieles seguidores, lo que les habría restado algunos puntos. Pero parece que estos clientes si están verdaderamente satisfechos con su compra.
Destacan también los buenos resultados de BMW, con un 62% de clientes satisfechos, a diferencia de su filial Mini, que sólo cuenta con un 27%. Algo que según la encuesta, se debe principalmente a la baja autonomía de los Mini eléctricos, principalmente los de primera generación, que en el caso del Cooper SE se quedaban en 234 km WLTP con su pack de 32.6 kWh.
El dúo Hyundai-Kia completa el top 5, con un 56 y un 52% de “promotores” respectivamente y apenas 12 y 10% de detractores. Los clientes del grupo están en su mayoría satisfechos con la potencia de carga de sus coches eléctricos (gracias a la plataforma de 800 V de algunos de ellos), pero aún lamentan las deficiencias en materia de planificación de rutas, que Hyundai y Kia han solucionado tarde.
Stellantis y MG cierran el listado
En términos de clientes insatisfechos con su compra, el premio es para las marcas del grupo Stellantis. Sus clientes se quejan, en particular, de problemas de software y de conectividad.
Aquí hay diferencias y por ejemplo, a Fiat le va relativamente bien, con «sólo» un 20% de detractores frente a un 42% de «promotores», probablemente gracias al 500 eléctrico, que ha tenido buena acogida.
Pero el resto del grupo cierra este ranking de satisfacción de sus propietarios. Opel, Citroën y Peugeot, cuyos coches eléctricos comparten un desarrollo común, no superan el 10% de “promotores”. En Peugeot, la marca peor clasificada, sólo el 3% de los clientes recomendaría los coches eléctricos de la marca, frente al 62% que lo desaconsejaría.
MG, a pesar de la buena relación calidad/precio de sus coches eléctricos, no convence en gran medida a sus clientes. Sólo un 17% de ellos recomienda la marca china, mientras que un 35% la desaconseja.
Si bien aprecian la autonomía, los clientes de MG lamentan importantes deficiencias en el lado del software, especialmente en términos de planificación de rutas.
A Renault le va ligeramente mejor con un 25% de “promotores” y un 24% de detractores de la marca. Su filial de bajo coste, Dacia, obtiene resultados mucho peores, con un 18% de “promotores” y un 31% de detractores. Malas noticias para el Dacia Spring, sin duda el coche eléctrico más barato del mercado europeo, pero no el más recomendable.
Según el estudio, el apartado de la carga es uno de los que más defraudan a los clientes de Renault y Dacia. Algo que tiene que ver con la absurda política de convertir la carga en alterna o continua en elementos opcionales. Algo que muchos clientes no entienden, principalmente por el nulo conocimiento en los concesionarios, hasta que es demasiado tarde.
También llama la atención la baja posición de Audi, muy alejada de sus hermanos del Grupo Volkswagen, con un 37% de clientes que no recomendarían la compra de un coche eléctrico de Audi. Una cifra esta última elevada, si la comparamos con el 25% de clientes insatisfechos de Cupra, 21% de Volkswagen, o solo el 15% de Skoda.
Font, article de Carlos Noya per a "Forococheseléctricos"
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