Este invento puede ser de gran ayuda para profesiones muy demandante físicamente como la de los bomberos o de gran ayuda para personas con movilidad reducida o que hayan sufrido enfermedades como el Párkinson.
Hay ciertas personas que debido a profesiones que requieren mucho esfuerzo o que por desgracia sufren enfermedades que les impide mucho el movimiento, o sufren problemas respiratorios, entre otros, sufren de mucha fatiga y cada desplazamiento o pasos son más complejos y duros.
Por ello, para facilitar el movimiento y reducir la fatiga en estos casos, unos especialistas de la Universidad Miguel Hernández (UMH) de Elche y el Centro Tecnológico del Calzado (Inescop) en colaboración con la empresa Panter, han presentado unas botas robóticas y autónomas que reducen la fatiga entre un 13 y un 15 %.
¿Cómo funcionan las botas robotizadas?
Este calzado ha sido diseñado con la mente puesta en el trabajo de los bomberos, y que reduce el consumo de oxígeno, mejorando así las intervenciones de los equipos de emergencia, además de reducir las posibilidades de lesión en sus actuaciones. Para su desarrollo también han participado diferentes efectivos del Consorcio Provincial de este cuerpo adscritos a la Diputación de Alicante.
Estas botas funcionan con un algoritmo de inteligencia artificial, la cual también ayuda a detectar enfermedades, capaz de diferenciar si el usuario anda en una superficie plana, sube una cuesta o la baja. En propias palabras de Nicolás García, catedrático de la UMH e investigador del Instituto de Bioingeniería, va a permitir que los bomberos trabajen más horas o que lo hagan más descansados y puedan realizar su labor de mejor manera.
Beneficioso para personas con movilidad reducida
El investigador también ha remarcado que también serán útiles para personas con movilidad reducida, enfermos de párkinson o que hayan sufrido un ictus, pero que no se utilizará como tal el mismo sistema, ya que incluirá una modificación. Esta consiste en unas unidades robotizadas y autónomas alimentadas por baterías intercambiables y con niveles de ajuste personalizado.
La directora de Inescorp, Francisca Arán, asegura que han estudiado las necesidades de los usuarios, como el peso que cargan, el número de horas de uso, la adecuación de la bota y que todavía tienen que evolucionarlo para convertirlo en un producto comercial. Además, siguen trabajando para que en poco tiempo pueda llegar al mercado y proporcionar este gran nivel de ayuda tanto a profesiones físicamente demandantes como a personas que la necesiten.
Font, article de Mario Bordonaba per a "20 minutos"
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