Esta meseta submarina es casi tan grande como Reino Unido y se construyó en varias fases volcánicas distintas.
La superestructura que se remonta a la era de los dinosaurios comenzó a formarse con erupciones volcánicas durante el período Cretácico (hace 145 a 66 millones de años), y todavía se encuentra en fase de crecimiento en la actualidad, descubre una nueva investigación publicada en la revista Earth and Planetary Science Letters.
La meseta fronteriza de Melanesia, ubicada al este de las Islas Salomón (y que es un cementerio geológico de arrecifes muertos e islas fallidas), se formó a través de cuatro pulsos separados de vulcanismo, todos con diferentes causas. Estas superestructuras geológicas suelen ser el resultado de enormes volúmenes de roca que se desprenden del interminable deslizamiento y trituración de la tectónica de las placas oceánicas.
Algunas de las estructuras creadas por la actividad volcánica se han convertido en formaciones más grandes con el tiempo, generalmente en un gran evento en los bordes de las placas que forman la corteza terrestre, donde se encuentran dos placas; pero hay ciertas estructuras, como la superestructura de placa media oceánica, que tienen un origen menos obvio o sencillo.
¿Cuándo se formó?
Ahora, un estudio realizado por un equipo internacional de investigadores dirigido por el geocientífico Kevin Konrad de la Universidad de Nevada (Estados Unidos), ha descubierto evidencia crítica sobre la formación de la Meseta Fronteriza de Melanesia (MBP) -que cubre alrededor de 222.000 kilómetros cuadrados- que podría ayudarnos a comprender mejor las fuerzas que dan forma a todo nuestro planeta.
Los investigadores utilizaron datos sísmicos, muestras de rocas y modelos informáticos para identificar cuatro períodos de erupciones volcánicas en las profundidades de la superficie que comenzaron hace muchos millones de años. La meseta en cuestión está muy, muy por debajo de la superficie del océano.
Por ejemplo, durante una expedición oceánica en 2013, recolectaron muestras de roca de múltiples puntos alrededor de la meseta fronteriza de Melanesia dragando a lo largo de sus laderas durante una misión que duró cinco semanas. Hay que tener claro que extraer evidencia del fondo del océano no es tan fácil como buscar pistas en tierra firme, ya que se han dragado escasos minerales y los resultados anteriores apuntaban a, al menos, 25 estructuras volcánicas distintas responsables de su generación. Afortunadamente, tras analizar las edades y la composición química de estas rocas, pudieron reunir las piezas piezas suficientes de este rompecabezas.
Ubicación de la meseta fronteriza de Melanesia, cerca de Fiji
Cuatro fases
La corteza terrestre es un intrincado mosaico de placas tectónicas que se mueven constantemente, y la meseta fronteriza de Melanesia es un excelente ejemplo de la compleja interacción entre estas placas.
Según el nuevo estudio, la meseta comenzó a formarse a partir de la actividad volcánica submarina durante el período Cretácico cuando los dinosaurios aún vagaban por la Tierra. Una parte de la meseta subyacente a las otras rocas, conocida como Robbie Ridge, probablemente se formó hace 120 millones de años durante una enorme inundación de lava basáltica, lo que condujo a la creación de una gran meseta submarina que probablemente no se elevaba sobre el nivel del mar. Es la primera fase gracias al derrame masivo de lava que coincidió con la desintegración del supercontinente Gondwana.
Unos 45 millones de años después (hace entre 56 y 33,9 millones de años), la misma sección debilitada de la corteza se encontró con una segunda región conocida como punto crítico Rurutu-Arago, donde aconteció el surgimiento de nuevas islas y montes submarinos; esto es, la meseta experimentó un mayor crecimiento a medida que avanzaba sobre un punto volcánico, lo que llevó a la creación de más montes submarinos e islas que nuevamente se erosionaron bajo el nivel del mar con el paso del tiempo.
Otro evento más. El tercero ocurrió durante la época del Mioceno, hace entre 23 y 5,3 millones de años, cuando las ballenas y los tiburones se hicieron numerosos en los océanos y los primeros simios comenzaron a caminar erguidos. En ese momento de la historia de la Tierra, algunas de las islas y puntos críticos existentes se reactivaron cuando la región pasó sobre el punto crítico de Samoa. Este período de actividad estuvo influenciado por una colisión entre la placa australiana y la meseta de Ontong Java, así como por la actividad volcánica del punto caliente de Samoa.
¿El cuarto evento? Desde ese momento hasta la actualidad. Es el cuarto pulso de formación de la meseta debido a una columna ascendente de roca caliente desde las profundidades de la Tierra que sigue dando forma a la estructura de la meseta. Según los expertos, las fuerzas que deforman y cicatrizan nuestra corteza terrestre, continúan a día de hoy dando forma a la superestructura en un proceso muy complejo y lento.
Los investigadores volverán junto a Ocean Exploration Trust y la Administración Nacional Oceanográfica y Atmosférica a realizar una nueva misión de exploración y dragado de las profundidades del Pacífico para analizar las muestras y continuar arrojando luz sobre la complejidad del origen de las grandes formaciones ígneas del mundo submarino.
Font, article de Sarah Romero per a "Muy interesante"
No hay comentarios:
Publicar un comentario