Toyota anuncia la llegada de un tipo de motor no visto hasta ahora en su gama en España, aunque hay un 'pero

 

Con vistas a que la comercialización de su todoterreno pueda cubrir el abanico más amplio de clientes posible, la marca ha anunciado que estará disponible en nuestro mercado con un tipo de mecánica no vista hasta ahora en su gama.

El Land Cruiser es una de las joyas de la corona de Toyota. Es su denominación más longeva y uno de los modelos que más ha aportado a la consagrada fiabilidad que caracteriza a la firma japonesa. Gran parte de su fama en este aspecto la debe a su motor diésel de 2,8 litros y cuatro cilindros, uno sobre sobre el que Toyota ha anunciado que va a efectuar cambios para poder adaptarse a las normativas del continente europeo.

Como no podía ser de otra manera, y estando ante el fabricante de coches híbridos por excelencia, la marca ha anunciado que, aprovechando la reciente renovación del Land Cruiser, implementará en el modelo este tipo de tecnología, combinando por primera vez el diésel con la tecnología de hibridación.

Y es que, con un bloque de tal capacidad aportando la potencia a todo el conjunto, que no se antoja pequeño ni mucho menos eficiente aerodinámicamente, sería difícil para la marca compensar con las ventas del resto de modelos las emisiones generadas por el Land Cruiser si sólo se vendiera en formato diésel en Europa.

La parte negativa de todo es que, dado el tamaño del todoterreno, un sistema eléctrico de 48 V apenas interferirá en la experiencia de conducción más que para aportar un pequeño plus de potencia y rebajar, si acaso, unas décimas el consumo total. Un sistema híbrido convencional como el anunciado para Estados Unidos sí sería capaz de rodar más tiempo en modo eléctrico.

Los japoneses calculan dar comienzo a las entregas del Land Cruiser con motor diésel convencional a lo largo de la primera mitad del año, mientras que no se espera que sea hasta ya entrado 2025 cuando la marca lance en Europa la versión híbrida ligera.

Poniendo en el mercado una mecánica de este tipo, Toyota espera lograr el equilibrio entre lo que buscan los clientes más fieles al modelo -es decir, la fiabilidad de un motor diésel con la nula o mínima interferencia de un sistema eléctrico en la experencia de conducción- y la reducción de emisiones y consumos, con el consiguiente distintivo Eco de la DGT.

Con esta noticia, queda casi completamente descartada la posibilidad de ver aquí el esquema híbrido denominado i-Force Max que sí ha sido confirmado para mercados como el estadounidense. Se trata de un conjunto en el que se implementa un motor eléctrico de 48 CV de potencia para lograr una cifra total conjunta de 326 CV.

Todavía es pronto para determinar una franja de precios en la que la marca situará a su todoterreno, aunque sí podemos dar por hecho que el precio se elevará con respecto al Land Cruiser que todavía se puede comprar en España, que parte de 51.400 euros.

Font, article de Alejandro González per a "Híbridos y eléctricos"