El secreto que esconde el Punto Nemo: está a 2700 kilómetros de la civilización y alberga cientos de satélites

 

El Punto Nemo es el lugar más remoto de la Tierra en medio del mar y sirve como cementerio de naves espaciales.

Lejos, muy lejos de cualquier punto de la Tierra habitado por el ser humano se encuentra el Punto Nemo o Polo Oceánico de Inaccesibilidad. Un punto que se halla en las coordenadas exactas de 48 grados 52,6 minutos de latitud sur y 123 grados 23,6 minutos de longitud oeste. Este remoto lugar en mitad del océano tiene el récord de ser el más lejano de cualquier núcleo de población a 2.7000 kilómetros de distancia.

Pese a que puede ser un punto más alejado del planeta simplemente curioso por su lejanía, lo cierto es que tiene un destacado interés, sobre todo para la NASA. De hecho, la agencia espacial estadounidense lo ha bautizado como su “cementerio de naves espaciales” particular. ¿Qué cómo es esto? Muy sencillo, allí se lleva toda la chatarra espacial que se genera en Estados Unidos.

El Punto Nemo es un enorme cementerio de naves espaciales de la NASA

Cuando en la órbita terrestre hay un satélite, estación espacial o nave que ya no sirve a la NASA, esta programa su derribo de manera controlada. Para eliminar esta chatarra de la órbita y evitar el peligro de que caiga en medio de una ciudad o pueblo cualquiera, los responsables de la NASA eligen el Punto Nemo para su impacto.

Al ser el lugar más lejano y no habitando nadie la zona, la agencia espacial estadounidense puede estrellar allí deliberadamente todos estos vehículos espaciales sin peligro a dañar ni una vida ni tampoco las propiedades ajenas.

Bill Ailor, ingeniero aeroespacial y especialista en reentrada atmosférica, hizo unas declaraciones que han sido recogidas por Business Insider. En estas comentó respecto al Punto Nemo que es "es un gran lugar donde puedes dejar las cosas sin golpear nada”. La verdad es que tiene su lógica, pero no está libre de problemas.

El mayor de los problemas que tiene esta “estrategia” es la contaminación que se está produciendo en esta zona del océano por la reentrada y choques reiterados de la chatarra espacial. No solo eso, sino que este cementerio no deja de ampliarse año tras año con más naves.

Según los informes existen miles de estructuras de tipo cohete desperdigadas y fuera de control por la órbita terrestre. Este es otro problema, ya que podrían precipitarse en cualquier momento y herir a alguna persona. A esto se une que hay 12.000 objetos del tamaño de un puño que igualmente podrían representar un peligro.

Como seguía informando Bill Ailor, se ha descubierto que mucha de la basura espacial puede estar orbitando durante cientos de años. En algunas zonas esto se ve aumentado a miles de años. Sin embargo sigue siendo un problema de contaminación orbital y también oceánica que habrá que solucionar en un futuro próximo.

Font, article de Ismael López Domínguez per a "Mundo deportivo"