El nuevo y loco plan de Emiratos Árabes Unidos. Convertir el desierto en un auténtico bosque

 

Su plan es crear una espina dorsal en Dubái con millones de árboles

Los países del Golfo Pérsico tienen proyectos sorprendentemente ciclópeos para transformar sus respectivas naciones

Dubái es hoy en día conocida como la ciudad del lujo, de los grandes rascacielos y del comercio. Sin embargo, la ciudad tiene un clima poco amigable con la vida ya que alcanza con facilidad los cincuenta grados centígrados, con todo lo que ello supone. A esto hay que sumarle su clima desértico y la escasez de zonas verdes por esta misma situación. Algo que ahora parece que las autoridades emiratíes quieren solventar creando un gran parque con forma de línea recta de más de 64 kilómetros de longitud. 

Así, la ciudad con el edificio residencial de lujo más grande del mundo tiene por objetivo darle un lavado de cara a la estética de sus calles con la creación de un gigantesco parque.

Un cambio en el paisaje de Dubái

Emiratos Árabes Unidos tiene un nuevo plan

 para convertir su ciudad más poblada, Dubái, en un auténtico vergel lleno de naturaleza y árboles que puedan sobrevivir en el inclemente clima de la región en la que se sitúa. Así, de acuerdo con la empresa creadora, Urb, el emirato estaría buscando transformar una antigua autopista en una senda peatonal cubierta por más de un millón de árboles convirtiendo así el desierto en un auténtico bosque de una manera sorprendente.

Con 64 kilómetros de longitud, la idea es transformar la carretera Sheikh Mohammad bin Zayed en una plantación de más de un millón de árboles, con un tranvía eléctrico alimentado por paneles solares que será capaz de abastecer con energía también a 130.000 hogares. Para que el agua de la lluvia sea aprovechada totalmente se instalarán drenajes ecológicos conocidos como bioswales que permitirán gestionar este tipo de aguas y reservarlas para el riego.

Además de todas estas tecnologías, la zona tendrá parques, granjas urbanas y jardines en los que la naturaleza y el ser humano se encontrarán completamente conectados. Valoran incluir también zonas de juego y zonas de ejercicio al aire libre para apoyar un estilo de vida saludable mientras se hace deporte, así como vías ciclables y senderos peatonales, convirtiéndose así en una obra magna de la ingeniería que buscará transformar la manera en la que vemos Dubái hoy en día.

El comercio también tendrá su lugar en la ciudad más exótica y lujosa del mundo. Han planeado que haya tiendas de alimentos y zonas comerciales más o menos amplias en las que poder consumir. Aun así, el objetivo no es que se convierta en una zona comercial per se, ya que la idea es que promueva un estilo de vida saludable y se prescinda del tráfico de vehículos de combustión.

Se trata de un proyecto de varios años sin una fecha de finalización completa, pero es cierto que suena bastante ambicioso y que forma parte de un plan todavía mayor conocido como Dubái 2040. Sea como fuere, este tipo de planes recuerdan a los de su vecino, Arabia Saudí, con The Line aunque su plan no es tan exagerado como el del príncipe Mohammed Bin Salman.

Font, article de Esteban García Marcos per a "La Vanguardia"