Se ha asomado a 'La Ventana' Noelia García, una joven que hace unos meses se presentó al MIR y contestó el 95% de las preguntas correctamente, un porcentaje que nadie había conseguido desde hace más de veinte años.
Afronta con muchas ganas ese aprendizaje, y aunque todavía no ha decidido la especialidad que quiere elegir, tiene claras cuáles son sus opciones favoritas. "Dermatología o endocrino", ha dicho, para luego incluir "anatomía patológica", aunque en este último caso, ha reconocido que no le gusta mucho "trabajar tanto con el olor a formol".
A la hora de plantearse cómo quiere continuar con su formación, Noelia ha buscado "la mejor intersección entre lo que a mí me interesa y ese factor de calidad de vida", en referencia al elegir ramas en las que no sea obligatorio "hacer guardias de 24 horas". Para ella, la excelencia y la vocación médica no son mutuamente excluyentes. Le apasiona la medicina, quiere dedicar a ella su vida, pero supeditar ni sacrificar su propia felicidad.
"Qué tipo de médico quieres ser"
Es en este momento cuando se ha unido a la conversación la sanitaria Tamara Contreras, a raíz de una iniciativa en change.org para que se reduzcan o se anulen estas guardias de un día de duración, que "ponen en riesgo la vida de los pacientes".
Además de describir su propia situación y la de tantos compañeros, la doctora con casi veinte años de experiencia se ha dirigido a Noelia García para destacar que, para el mundo de la atención sanitaria en el que está a punto de entrar, "no está preparado nadie". "Ahora viene la parte humana, lo duro", ha afirmado, para luego aconsejarle que "no se sienta con la presión" de no equivocarse, porque al fin y al cabo, "todos somos humanos" y "cargamos con mucho peso cuando fallamos".
La joven se ha mostrado de acuerdo con las palabras de Tamara, y espera que en su entorno “las expectativas no sean muy altas”. No se considera diferente del resto de compañeros que también han sacado el examen y que, al igual que ella, accederán a su nueva plaza a partir de mayo, en la que habrán de permanecer durante los próximos cuatro años. Ya lo dijo Kafka: lo decisivo no parece acabarse nunca porque, en realidad, lo hemos llevado siempre dentro de nosotros mismos.
Font, article de Nel Gómez per a "Cadena SER"
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