Es el túnel más largo del mundo, une dos islas y va por debajo del agua

 

El túnel Seikan es el más grande del mundo de cuantos cuentan con una distancia a recorrer en el plano submarino. He aquí las claves principales de esta obra faraónica.

La producción de obras faraónicas es algo que se ha repetido a lo largo de la historia. En el día de hoy queremos hablarte del increíble túnelSeikan, el cual dispone de un recorrido total de 53,85 kilómetros. Con una parte de superficie submarina, esta obra está pensada especialmente para la circulación de trenes. Se encuentra a 240 metros bajo el nivel del mar y ha tardado varias décadas su construcción total. ¿Cuáles son sus principales características que hay detrás de su tecnología? He aquí algunas de las claves que explican su desembolso.

El túnel más largo del mundo capaz de unir islas por debajo del agua

Entre los elementos diferenciales de esta infraestructura se encuentra, sin duda alguna, la disposición de hasta 23,3 kilómetros que se sitúan debajo del agua. Esta cualidad es lo que le permite posicionarse como la obra de esta clase con mayor número de kilómetros bajo la superficie del agua. Está creado para cubrir la distancia entre las islas japonesas de Tokio y Hakodate, una de las principales ciudades de Hokkaido. Esta cualidad es lo que le permite posicionarse como la obra de esta clase con mayor número de kilómetros bajo la superficie del agua.

Está creado para cubrir la distancia entre las islas japonesas de Tokio y Hakodate, una de las principales ciudades de Hokkaido. La ruta, denominada Hokkaido Shinkanse, tiene un recorrido con una duración de hasta 4 horas y media, teniendo un precio próximo a los 150 dólares.

Pese a que en un primer momento se valoró la idea de incorporar únicamente dos líneas de ferrocarril, posteriormente se apostó por la agregación de una tercera. De esta manera, el tráfico creció exponencialmente desde la apertura, la cual tuvo lugar allá por 1988. Tras todo el periodo de construcción se pudo comprobar cómo la materialización costó hasta 3.600 millones de dólares. Se trata, sin duda alguna, de uno de los proyectos históricamente más importantes en la historia de Japón.

Es cierto que en los próximos años se esperan proyectos de túneles muy destacados, tales como el de Elon Musk para acelerar y mejorar la gestión del tráfico, pero todo parece indicar que seguirá manteniendo el trono al túnel sumergido más largo del mundo durante un tiempo. De hecho, se cree que el próximo objetivo del país en materia de infraestructura es incrementar la ruta para que pueda alcanzar la región de Sapporo, lo cual podría suceder en el año 2030.

Una de las principales curiosidades de este increíble túnel es su capacidad para soportar la circulación de trenes a gran velocidad, incluyendo el tren bala. Esto incrementa las posibilidades de uso en el futuro, ya que podría albergar líneas de alta velocidad sin apenas integrar modificaciones en el itinerario y en las hojas de ruta. De acuerdo con Wikipedia, el tráfico de personas ha tenido luces y sombras, ya que ha habido periodos en los que se han producido fuertes incrementos de usuarios, mientras que en otros casos parecía tratarse de una opción poco rentable.

La disposición de una línea aérea capaz de completar la ruta en apenas hora y media ha provocado diversidad de opiniones a la hora de usar este medio de transporte. Sea como fuere, se espera que a lo largo de los próximos años se lleven a cabo nuevos esfuerzos por lograr una mejora en el servicio por ferrocarril para incentivar su uso por el público. ¿Conseguirá sobrepasarse en algún momento la velocidad máxima que logra alcanzar el actual tren considerado como el más rápido del mundo?

Font, article de Óscar Almarza per a "Mundo deportivo"