Carlos Mazón espera aprobar hoy el plan de formación que empezará en marzo mientras las pymes creen prudente esperar a mayo para saber si tendrán adjudicaciones del nuevo vehículo
El interés de las compañías no se ha manifestado firme, todavía, ya que el retraso del gobierno de Pedro Sánchez en tomar esta medida ha hecho que el mecanismo RED se haya hecho realidad en plenas fiestas navideñas. La reciente publicación en el BOE ha hecho que todavía no se haya podido aprobar el plan de acompañamiento que la Generalitat Valenciana va a realizar con los empleados de las empresas que opten por esta opción. La idea está clara pero falta que esté por escrito y aprobado.
La previsión es que el pleno del Consell que se celebra hoy tenga el expediente con todos los informes necesarios para que pueda aprobarse definitivamente el mecanismo con todas las administraciones implicadas. El plan de formación está previsto que empiece en el mes de marzo, por lo que aunque haya sido con las prisas navideñas se ejecutará el calendario previsto.
El interés de Gestamp, Forvia y Benteler de seguir los pasos de Ford Almussafes desvela una información que muchos proveedores valencianos no tienen aún atada ya que implicitamente supone que van tener carga de trabajo con el nuevo modelo de Ford Almussafes en 2027. Someterse al mecanismo RED permite aplicar un ERTE en el que se ahorra parte de los costes de Seguridad Social y se percibe la prestación por desempleo sin gastar el derecho que tiene cada trabajador. La condición en que se tiene que mantener el empleo una vez acaba el mecanismo RED.
De principio, el plazo del mecanismo RED es de un año pero tiene dos prórrogas de seis meses que permitiría, a priori, que se aplicara en los años 2025 y 2026 en su conjunto. En 2027 tendrían que tener la misma plantilla que tienen actualmente.
Por tanto, apuntarse al mecanismo RED supone preveer dos años sin producción (por ello la plantilla sobrante se va al mecanismo RED con formación) y un 2027 en el que sí que habrá carga de trabajo. Está planificación está clara en Ford Almussafes, que ya tiene en el calendario el lanzamiento del nuevo vehículo multienergía para 2027. Pero los proveedores no lo saben aún. En teoría.
Varias fuentes de la automoción consultadas apuntan a la primavera como el momento previsto de que Ford asigne las piezas del nuevo vehículo. A partir de ahí, muchos proveedores, especialmente los más pequeños, empezarán su plan de inversión y de gestión del personal. «Ahora mismo no sé si voy a estar en el RED o no porque no sé que voy a poder hacer del nuevo coche que llega en el 27 y para eso aún quedan dos años que van a ser muy muy duros«, comenta un pequeño proveedor.
Con esta incertidumbre sobre la mesa, los próximos meses se presentan críticos para el tejido empresarial auxiliar de Ford Almussafes ya que se va a determinar de manera definitiva quién va a continuar con la fábrica abierta pero también que nuevos proveedores podrían instalarse en la Comunidad Valenciana tras haberse adjudicado piezas del nuevo vehículo.
Otra cuestión crítica para los próximos meses es cómo de repartidas van a estar las piezas del nuevo vehículo. Otorgar a un único proveedor piezas críticas del vehículo provoca que si tiene un fallo se corta la producción. La enseñanza fue clara con la crisis de los microchips, que aunque eran «suministrados» por distintos proveedores varios tenían la planta de estampación (foundry, en terminología chip) en el mismo lugar.
Más recientemente, la inundación de las instalaciones de Industrias Alegre, una situación destrosa desvelada por Economía Digital y que paró la factoría de Ford Almussafes, volvió a demostrar que el hecho de que sólo hubiera un único proveedor de piezas críticas es un riesgos de parálisis de la producción.
La alternativa, que pasa por duplicar proveedores para mitigar este riesgo, supondría asumir una mayor coste de inversión por parte de las empresas al tener que duplicar maquinaria lo que encarecería el producto final, aspecto siempre preocupante pero que ahora se vuelve más peligroso ante la creciente competencia china no sólo en coches eléctricos sino también de combustión.
Cuando Ford tome la decisión y se traslade la decisión de qué mapa de proveedores tendrá la factoría de Ford Almussafes será cuando todos los proveedores podrán dimensionar sus plantillas y decidir si el mecanismo RED es o no una herramienta útil para los dos años tan complicados que va a vivir el entorno de la automoción de Ford Almussafes.
Font, article de Julián Larraz per a "Economía Digital"
No hay comentarios:
Publicar un comentario